Hay veces en que la vida te da un toque en el hombro, te dice «espera un momento»
Te toca el pecho, detiene un momento tu corazón, tu respiración agitada, te invita a sentarte un momento para contemplar tu vida desde un ángulo elevado, como desde un dron, aunque me gusta más pensar que es como que tu alma, tu mente, sobrevuela tu cuerpo como si fuese una gaviota o cualquier otra ave cerniéndose y planeando sobre tu propio cuerpo, estudiando y vigilando sus reacciones, sus sentimientos, sus relaciones y su entorno, un autodiagnóstico, un análisis extrospectivo de tu situación.
Es curioso cómo esa llamada de atención, esa segunda oportunidad, te hace plantear las cosas de distinta manera, es como un nuevo comienzo para llegar al mismo punto donde estabas pero sin los condicionamientos existentes que te llevaron a una situación concreta con unos vínculos también muy concretos formando un todo, un ecosistema personal.
Sin esos condicionamientos, estudias distintas alternativas, diversas soluciones muy dispares e incluso contradictorias y drásticas.
En unos días de ausencia te apercibes de que eres menos que un grano de arena, en un entorno que parecía firme y sincero te das cuenta de que el olvido actúa con rapidez, ya no interesas, no eres de utilidad, no eres aprovechable mientras no produzcas de nuevo, las palabras de ánimo, adulaciones, premios, no eran más que parte de un juego y sin valor fuera de ese engranaje.
¡Pobre iluso! Tus sentimientos de aprecio, cariño, apoyo, amistad que van más allá de ese juego, que por tu parte no tienen condiciones ni fecha de caducidad, apenas importan a nadie y personalmente podrías desaparecer sin que te echasen en falta salvo contadisimas personas.
Piensas que sería una solución mandar todo a la mierda, o al menos actuar sin que te afecten los sentimientos personales, simplemente establecer unas relaciones asépticas, interesadas, válidas en la medida en que puedas aprovecharte de ellas.
Mientras estoy en esa nube dudando si llover, tronar, arrasar o dejar que pase un cálido sol, recibo llamadas de preocupación por mi ausencia, por mi salud, animándome a continuar adelante, demostrándome que en esos contados casos los sentimientos y la amistad son sinceros, no condicionados a intereses ni a juegos sino que la amistad y confianza son recíprocos y profundos.
Así que aunque solo fuese por esas contadas personas tan maravillosas y valiosas, por no defraudar su amistad, su apoyo y cariño sinceros, no puedo por menos que continuar adelante, procurar hacerlo lo mejor posible aunque la orientación, dirección a seguir o relaciones con otros blogs puedan cambiar drásticamente, procurando no perder demasiadas energías en esas relaciones y seguimientos, energías necesarias para concentrarme en mi vida, en mi blog y en lo verdaderamente necesario para una vida sana física y mentalmente.
Gracias de todo corazón a esas personas maravillosas que me habéis apoyado y animado en momentos delicados; sois lo más valioso de este mundo, el verdadero tesoro como personas, así que por vosotros y con vosotros sigo adelante sin rendirme, ni en el blog ni en la vida.
Son los momentos que nos detienen y hacen pensar en la fragilidad de la vida..y en los valores que a veces olvidamos . Muy buenas reflexiones.
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Claro, corazón! La vida sigue porque hay personas que te quieren y necesitan que estés en las suyas. No te rindas nunca, porque te rodean muchas sonrisas y cariño.
Un abrazo grande, grande y apretadito.
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Gracias por tu mirada y tus sonrisas, María.Un abrazo grande y muchos besetes de fin de semana.
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Cuídate lo único que importa es tu salud, aunque te echemos de menos
Feliz fin de semana
Abrazos
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Feliz fin de semana también para ti, Carmen y gracias por tu apoyo y tu amistad. Abrazos luminosos!
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Gracias a ti y lo dicho cuídate, hace falta gente como tú por estos lares. Feliz sábado
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¡Jajaja! Me cuidaré, Carmeta, yo soy quien más me necesita.
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Un abrazo.
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Un abrazo, Gema.
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Porque tenemos que vivir, sentir, una experiencia desagradable o demoledora para comenzar a ver la vida desde otra prespectivas, para valorar lo realmente importante y priorizar las cosas?.
Cambio radical……
Que bonito es ver despertar un nuevo dia, la charleta con los amigos, una flor que comienza a salir, incluso ver caer la lluvia.
Aprendamos a vivir más despacio, para ver las cosas tan maravillosas que pasan desapercibidas.
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Es cuando ocurre algo que remueve nuestra vida cuando salimos de la rutina y reflexionamos con más calma, con otra visión y otra perspectiva.Y la vida sigue y seguimos disfrutando cada día, cada pequeño detalle, cada relación personal, valorando su riqueza y cuanto suponen esas muestras de apoyo y de cariño sincero.Gracias por el tuyo, Marbel, al que correspondo con un gran abrazo igual de cariñoso.
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Ya sabes que tengo algunas dificultades para pasar con frecuencia por todos los Blogs, pero hoy, poniéndome al día, he leído esta entrada, y debo decir que comprendo perfectamente lo que se lee más allá de las palabras. Llegan algunas situaciones en la vida, donde nos damos cuenta de muchas cosas. Yo estoy pasando por algo similar, pero a al inversa. Tengo una gran amiga, que desapareció… Así sin más. He intentado demostrarle que «estoy allí», pero ayer me llamó para decirme que necesita estar desconectada de todos, incluso de mí. La comprendí. Pero también reconozco que mi corazón se puso triste. Como bien dices, la vida sigue. Y mientras avanza, capturamos valiosas lecciones que se sellan en nuestro corazón, como por ejemplo, las verdaderas amistades, el verdadero amor, el interés genuino en las relaciones interpersonales más allá del mero «interés». ¿Lo lindo? Es que tú me importas, aunque no te conozco de nada, en verdad. Así que deseo de corazón que sea lo que sea que haya pasado, todo esté mejor. Levantaré una oración por ti. Un fuerte abrazo, y ahora más que nunca, valora a esas personas que sí se han preocupado por ti, de verdad. Muchas bendiciones y besitos Amalaidea 🙂
Lihem ben Sayel.
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Hola, Lihem. Hay que comprender que a veces no se quiere hablar con nadie, yo diría que ni con uno mismo, y no queda otra solución que permanecer a su lado, que se sienta apoyada, en espera de que permita ayuda.
La vida sigue y como dices establecemos relaciones interpersonales sinceras de forma intuitiva; sin conocernos y sin apenas hablar y aun con opiniones o ideas muy distintas, se establece un vínculo de confianza, de empatía, de respeto y de cariño sincero y sentimos esa cercanía y ese apoyo más allá de las palabras.Gracias por tu apoyo y tu cariño, Lihem; un gran abrazo y besitos llenos de mis mejores deseos de felicidad para tí.
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Sí, sólo puedo darte la razón 🙂 Debemos aprender a respetar los tiempos de cada persona. Y en cuanto al vínculo que mencionas, es totalmente real… Y esa es una de las experiencias más bellas que me llevo de estos espacios. De corazón espero que ya estés bien, y que puedas disfrutar de esta maravillosa semana que comienza. Un fuerte abrazo… 🙂
Lihem.
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Gracias, Lihem, disfrutemos en la medida de nuestras posibilidades. Un gran abrazo!
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Pasé estos días pensando donde estaban las ideas malas que por mi mente de vez en cuando pasan volando.
Mas la prudencia que me ha tocado, me hizo estarme callada esperando a ver si un día en mi puerta golpeaban.
un abrazo de los mios, de los pilongueros
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La prudencia con calma se ha quedado pero las malas ideas, al escuchar a Margui corriendo con ella han marchado.
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Uy ya voy sintiendo el gusanillo de la mala leche brotando, ¿será que ya está aquí el azul intenso azuzando?
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Yo que pensaba que eran moratones y resulta que son los brotes azules de mis ideas!
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jajajaja, y que pensabas que eran?, ¿restos de alguna aguja ingrata?
jajajajaj
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Dependiendo del sitio, chupones, mordiscos… yo qué sé!
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joder, no fueron tan malos los días de ausencia jajajaja
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Sea lo que fuere lo que te ha tocado el pecho, que la angustia pase pronto. Ánimo, que la vida sigue.
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Gracias, Johan!
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Mucho ánimo!! Un gran filósofo decía que somos una insignificancia dentro del universo, y es verdad, pero aún así la vida siempre vale la pena vivirla aunque a veces haya que superar obstáculos.
Un fuerte abrazo
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Gracias, María, abrazos para ti.
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Nunca hay que rendirse el camino es largo, duro hay veces que escabroso pero siempre hay que continuar, besos enormes de viernes Amalaidea, muackssss.
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Gracias, Silvia, de corazón. Besos y abrazos sinceros para ti.
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Feliz fin de semana, Silvia. Besines primaverales, muackkks!
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