Poco hay que añadir a esta maravillosa canción de Alberto Cortez.
Cuando se va, cuando se pierde una amistad de las auténticas, queda un espacio vacío, en tu vida y sobre todo en el alma y ese espacio no se puede llenar con nada, vagamente señalar o adornar con sus recuerdos pero seguirá ese vacío, esa añoranza, siempre quedará ese espacio reservado para esa gran amistad.
Si la amistad es compartir sentimientos, ilusiones, penas y alegrias, si es la unión de dos almas, al romperse ese vínculo el alma queda a la deriva, con una puerta abierta al vacío, al desierto, a la soledad.
Pero dejémonos de nostalgias y escuchemos esa gran canción y ese gran intérprete que es Alberto Cortez.
Para esas amistades que se van… y para las que, con el corazón roto, tratan de sobrevivir a esa gran ausencia, a ese gran eterno vacío, con todo mi cariño.
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Cuando un amigo se va (Letra)
Cuando un amigo se va
queda un espacio vacío
que no lo puede llenar
la llegada de otro amigo.
Cuando un amigo se va
queda un tizón encendido
que no se puede apagar
ni con las aguas de un río.
Cuando un amigo se va
una estrella se ha perdido
la que ilumina el lugar
donde hay un niño dormido.
Cuando un amigo se va
se detienen los caminos
y se empieza a revelar
el duende manso del vino.
Cuando un amigo se va
galopando su destino,
empieza el alma a vibrar
porque se llena de frío.
Cuando un amigo se va
queda un terreno baldío
que quiere el tiempo llenar
con las piedras del hastío.
Cuando un amigo se va
se queda un árbol caído
que ya no vuelve a brotar
porque el viento lo ha vencido.
Cuando un amigo se va
queda un espacio vacío
que no lo puede llenar
la llegada de otro amigo.
Alberto Cortez
Amalaidea 