Regresión

Hoy precisamente, día en que Anita pone en su blog las cosas que le gustaría encontrarse cuando visita otros blogs, y con las que en general estoy de acuerdo, hoy precisamente estoy pensando en incumplir algunas de ellas.

No es por llevarle la contraria, pero estoy pensando replegarme un poco sobre este blog y reducir los comentarios en otros que sigo o visito habitualmente.

Ante todo quisiera hacer una aclaraciones sobre todo esto.

Sobre comentar en otros blogs, suelo hacerlo últimamente si tengo confianza, pero no lo hago si en comentarios anteriores han expresado ya lo que yo quería decir. Tampoco lo hago en muchas ocasiones en que siempre me gustan las entradas y dibujos de un blog y ya lo he manifestado en más de una ocasión, me cuesta decir siempre «tus poesías, tus textos, tus dibujos son maravillosos» pienso que ya lo saben y que un simple «Me gusta» es suficiente y no hay nada que añadir a esa entrada tan preciosa.

Parto de pensar que más o menos harán como yo hago: no me quedo en lo físico de un me gusta o de un comentario sino que lo interpreto, lo miro con ojos interiores y veo muy diferentes unos me gusta que otros pues sé o intuyo la intención o el aprecio y cariño puestos en él, por lo que un me gusta puedo considerarlo rutinario y otro sentirlo con más mensaje que si me dejase un largo comentario.

Agradezco igualmente los comentarios y las muestras de apoyo y cariño y al igual que los me gusta, una simple palabra me puede llegar al alma más que un largo comentario, o al revés.

Confío en que, al menos los blogs con los que tengo más confianza o afecto interpreten así mis me gusta, cargados de apoyo y cariño y que escuchen o sientan lo que no digo con palabras.

Todo esto venía a cuento de que he decidido replegarme un poco, reducir el tiempo pululando por otros blogs, sustituir los seguimientos por visitas esporádicas o frecuentes, depende del caso, y hacer vida más recogida en mi casa, en mi blog donde siempre seréis bien recibidos y acogidos con el cariño de siempre.

Necesito un poco de calma, de frenar un poco la marcha, de implicarme un poco menos.

Poco a poco se van formando vínculos afectivos, algo maravilloso y que por mi parte continuarán y haré lo posible por dar mi apoyo y mi ánimo siempre que intuya que alguien lo necesita pero por otra parte debo tener claro que mi grado de implicación o de sentimiento hacia cualquiera, no implica que exista en la misma medida en la dirección de vuelta. Sé que no tiene por qué ser correspondido pero a veces piensas que así es e interpretas una respuesta educada o cariñosa con la misma carga que yo le pondría, lo que en ocasiones lleva a causar pequeñas frustraciones o desilusiones por esperar lo que no es lógico esperar.

Por todo esto y porque de vez en cuando se necesita reposar y repostar, es por lo que centraré más mi interés en cuidar más de mi propia casa, recibir aquí vuestras visitas siempre bienvenidas, y visitar las vuestras cuando realmente tenga ganas e ilusión en hacerlo.

Quizás hecha esta reflexión no cambie mi forma de actuar pero entonces lo haré más conscientemente y con mayor ilusión y si no es así confío en que comprendáis los motivos de mi cambio de actitud.

Sea como sea, ya sabéis:

¡¡Cuidaos, vivid la vida y procurad ser muy felices!!